En 2022, el Parlamento Europeo respaldó la inclusión de la energía nuclear y el gas natural en la taxonomía verde, permitiendo que ciertas actividades relacionadas con estas fuentes fueran etiquetadas como inversiones sostenibles, siempre que cumplieran criterios técnicos específicos.
Desde entonces, la política energética de la UE ha evolucionado significativamente. En febrero de 2025, la Comisión Europea presentó el Plan de Acción de Energía Asequible, parte del «Acuerdo Industrial Limpio», con el objetivo de reducir los costos eléctricos, ampliar el acceso a energías limpias y diversificar los proveedores. Este plan incluye medidas como:
- Nuevas tarifas para el uso variable de la electricidad.
- Separación de los precios minoristas de la electricidad del gas natural.
- Aceleración de los permisos para proyectos de energía renovable.
Además, en febrero de 2025, la UE anunció el «Acuerdo Industrial Limpio» para ayudar a las industrias más contaminantes a transitar hacia un futuro de emisiones netas cero y fomentar las empresas de tecnología limpia. Este plan busca reducir las emisiones en un 90% para 2040 mediante:
- Establecimiento de un banco de descarbonización industrial con 100 mil millones en fondos públicos.
- Permisos más rápidos para infraestructuras de energía limpia.
- Cambios en las reglas de contratación pública.
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